¡¡OSTRAS¡¡

Si el amigo perezoso muestra en su blog el motivo de su "para técnica", yo voy a hacer lo mismo, os muestro el motivo de la misma.
Sucedió el viernes por la tarde. Entramos con los niños en un bar de Jaén y pedimos 6 ostras, 2 para pilar, 2 para mi hijo mayor y 2 para mí. Riquísimas y fresquísimas. Me encantan las ostras. Siento debilidad por ellas. Comimos otras raciones y varias bebidas y de vuelta a casita. Hacía mucho frío,por cierto.
El sábado por la tarde salí a correr, y la verdad es que complete una salida magnífica: 1 hora y 8 minutos. No hacía ese tiempo desde antes de noviembre, cuando caí enferme y estuve más de un mes parado.
El domingo amaneció un día normal, pensaba salir por la tarde a correr también, algo más suave, 30 minutillos de relajación. Pero después de comer sentí una pesadez como nunca había sentido. Al almuerzo de ese día le eché la culpa, y empezaron mis viajes al cuarto de baño.
Cuando pilar y mi hijo sintieron los mismos síntomas, descrubrimos al culpable, bueno, a las culpables: LAS OSTRAS.
Resultado: ayer lunes no pudi ni ir a trabajar, ni yo ni mi mujer y mi hijo tampoco pudo ir al colegio. Hoy ya estoy bien, espero salir esta tarde a volver a correr.
No sé que haré cuando me pongan una bandeja de ostras delante. La verdad es que son mi locura...